domingo, 25 de octubre de 2015

"EL VEGETAL" - LA HISTORIA DE CRISTIAN MARIANO DEPPELER


"El Vegetal" - La historia de Cristian Mariano Deppeler







Este video se hizo viral en Facebook en menos de 24 horas.. Pueden ver los resultados en https://www.facebook.com/photo.php?v=...





jueves, 22 de octubre de 2015

APERTURA DE LA INSTRUCCIÓN DIOCESANA DE LA CAUSA POR MARTIRIO DE MONS. ENRIQUE ANGELELLI





APERTURA DE LA INSTRUCCIÓN DIOCESANA DE LA CAUSA POR MARTIRIO DE MONS. ENRIQUE ANGELELLI


El pasado 13 de octubre tuvo lugar en la Catedral y Santuario San Nicolás de La Rioja, la sesión de apertura del procedimiento instructorio diocesano en la causa por martirio de Mons. Enrique Angelelli.


Después de haber recibido el parecer favorable de los peritos teólogos que tuvieron a su cargo el estudio de los escritos de Mons. Angelelli, Mons. Dr. José Ángel Rovai y R.P. Luis Liberti s.v.d., contando ya con la autorización de la Santa Sede y las autoridades de la Conferencia Episcopal Argentina, Mons. Colombo designó a las autoridades que conforman el tribunal diocesano que preside: Pbro. Enrique Martínez Ossola como Promotor de Justicia y Hna. Lucrecia Goyochea en calidad de Notaria. Como postulador de la causa se viene desempeñando el Pbro. Roberto Queirolo.


Además se nombró a los integrantes de la Comisión histórica que tendrá a su cargo el estudio de los archivos y el contexto vital en que transcurrió el ministerio sacerdotal y episcopal del Siervo de Dios Enrique Angelelli: Prof. Dr. Pedro Goyochea, Sr. Aurelio Ortiz y Sr. Luis Baronetto.


Durante la celebración de esta primera sesión, se distribuyó y rezó la oración para pedir la beatificación de Mons. Angelelli. Se establecieron los días y horarios en que se tomarán las declaraciones testimoniales que confluirán en la instrucción del proceso descripto. Después de agradecer a todos sus colaboradores la aceptación del encargo que se les ha confiado, Mons. Colombo resaltó la figura de Mons. Angelelli y su significación para el camino evangelizador de la Iglesia en La Rioja. Cercanos los cuarenta años de su asesinato, Mons. Enrique Angelelli sigue siendo una referencia insoslayable de Jesús, el Buen Pastor para el Pueblo de Dios peregrino en La Rioja. Las palabras “Justicia y Paz” que conforman su lema episcopal siguen invitando a acoger el Reino de Dios en nuestros corazones.




La Rioja, 14 de octubre de 2015.




Grupo de Curas en la Opción por los Pobres




sábado, 3 de octubre de 2015

41º PEREGRINACIÓN JUVENIL A LUJÁN: “GRACIAS MADRE POR ESTAR SIEMPRE, AYUDANOS A CUIDAR NUESTRA PATRIA”.

Lujan_Estampita2015



El sábado 3 de octubre se desarrollará la 41° Peregrinación Juvenil a Luján. Este año será bajo el lema: “GRACIAS MADRE POR ESTAR SIEMPRE, AYUDANOS A CUIDAR NUESTRA PATRIA”.


La peregrinación se iniciará el sábado 3 de octubre a las 12, en las puertas de laParroquia San Cayetano de Liniers, en Cuzco 150 (cerca de General Paz y Avenida Rivadavia). De allí, la imagen cabecera marchará junto a los peregrinos que recorrerán cerca de 60 kilómetros para llegar al Santuario de la Virgen de Luján. A las 7 de la mañana del domingo 4, se celebrará lamisa central.

Año tras año la cantidad de peregrinos fue creciendo. En 1975 comenzaron a caminar unas 30 mil personas. Cuarenta años después lo hacen cientos de miles. De hecho, la Peregrinación Juvenil a Luján es el acontecimiento más grande y renovador de la fe de nuestro pueblo.

Para ellos, la Comisión Arquidiocesana de Piedad Popular prepara todo el camino, con el único objetivo de que cada uno de ellos camine cómodo y seguro hacia la Basílica de Luján.

En abril, y como sucede todos los años, un grupo de laicos y sacerdotes se reunieron para definir el lema en función de las necesidades que los peregrinos dejan escrito en los Cuadernos de Intenciones de la Basílica de Luján. Luego de varios encuentros, el grupo de trabajo trató de intuir y reflejar el pedido que los peregrinos le están haciendo a la Madre de los argentinos en estos tiempos.

El común denominador de esas peticiones es el agradecimiento a la Madre de Luján, dejando de manifiesto que Ella está siempre, nos acompaña siempre.

Pero también le pedimos que nos ayude a comprometernos en el cuidado de la Patria, de nuestra Argentina. Se trata tomar responsabilidades desde lo cotidiano para buscar el bien común, el bien de todos. Cuidar la Patria no es solo un hecho eleccionario, como ocurre este año, sino también una tarea que todos pueden aportar desde sus roles y sus lugares, sin esperar que “un salvador” sea elegido.

Por otro lado, la Comisión Arquidiocesana de Piedad Popular entiende que no es sólo una súplica “hacia lo Alto”, sino también un compromiso de todos y cada uno de los argentinos de trabajar por la Patria.

Es así como surgió el lema que este año nos convoca y anima a llegar a la Virgen de Lujan:“GRACIAS MADRE POR ESTAR SIEMPRE, AYUDANOS A CUIDAR NUESTRA PATRIA”.

¿QUÉ ES LA COMISIÓN ARQUIDIOCESANA DE PIEDAD POPULAR?

Somos más de 6500 voluntarios que colaboramos en forma desinteresada en 70 puestos de Apoyo y Sanitarios. Con la experiencia y el compromiso de ayudar al prójimo, estamos preparando y coordinando todos los recursos necesarios para brindarles a todos los que caminen, los servicios que necesitan para alivianar su andar.

En forma totalmente gratuita, en los Puestos de Apoyo, brindamos alimentos y bebidas para todo el que lo requiera. También, atendemos las inquietudes de los peregrinos, escuchándolos y fortaleciéndolos con palabras de aliento que les ayude recorrer casi 60 kilómetros para llegar a la casa de la Virgen de Luján.

Desde el punto de vista sanitario, se realiza un gran operativo preventivo a lo largo de la ruta. Estos puestos son de suma importancia debido a que allí no solo se asiste ante una eventual emergencia sino también se colabora en suavizar los pies del peregrino. Estos Puestos Sanitarios estarán ubicados desde Liniers hasta Luján y cuentan con profesionales de la salud.

Es importante recalcar que todos los servicios se ofrecen gratuitamente y van a estar visiblemente identificados con la imagen de la Virgen de Luján y el número de puesto.

En forma mancomunada y totalmente altruista, participarán de éste operativo comunidades parroquiales, educativas y ONGs, entre otras instituciones.

También les dan una mano a los peregrinos: empresas privadas, obras sociales y profesionales de la salud, efectivos policiales tanto provincial como de los distintos municipios afectados por la Peregrinación Juvenil a Luján y miembros de Defensa Civil.

Como todos los años, además, colaboran organismos del Gobierno Nacional, Provincial y de los municipios afectados.

Es verdad que el peregrino “sale a caminar” sin que preparemos nada, pero tratamos de acompañarlos para que sea más llevadero el camino.

Un año más, y con la fe renovada, la Comisión Arquidiocesana de Piedad Popular quiere acompañar y servir, una vez más, a los fieles en su camino hacia la Virgen de Luján.



http://peregrinacionlujan.org.ar/

viernes, 2 de octubre de 2015

"ELLOS SON NUESTROS HERMANOS" Por Elena Llorente


El Papa saluda a sus admiradores durante la audiencia general de ayer en la Plaza San Pedro.Imagen: AFP





EL MUNDO › MENSAJE DEL PAPA EN LA JORNADA MUNDIAL DEL MIGRANTE Y DEL REFUGIADO

“Ellos son nuestros hermanos”

Francisco puso el acento sobre las causas y las consecuencias de los flujos migratorios, el tráfico de seres humanos, los naufragios, la insensibilidad de algunos, la actitud desconfiada de cierta gente, el silencio cómplice.


Por Elena Llorente
Desde Roma



En un mensaje para la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado, el papa Francisco supo resumir con gran énfasis y claridad sociológica, los puntos fundamentales de este tema, que ha generado una crisis con pocos precedentes en Europa pero que existe también en otras regiones del mundo. Francisco puso el acento sobre las causas y las consecuencias de los flujos migratorios, el tráfico de seres humanos, los naufragios, la insensibilidad de algunos, la actitud desconfiada de cierta gente, el silencio cómplice. “Los emigrantes son nuestros hermanos y hermanas que buscan una vida mejor lejos de la pobreza, del hambre, de la explotación y de la injusta distribución de los recursos del planeta, que deberían ser divididos ecuánimemente entre todos –escribió Francisco–. ¿No es tal vez el deseo de cada uno de ellos el de mejorar las propias condiciones de vida y el de obtener un honesto y legítimo bienestar para compartir con las personas que ama?”

Aunque la 102 Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado se celebrará recién el 17 de enero, el papa quiso dar a conocer el contenido de su mensaje ayer, consciente de cuanto sus palabras puedan influir en algunas actitudes pero también teniendo en cuenta que el 8 de diciembre inaugurará el Jubileo dedicado a la Misericordia. La Jornada del Migrante y del Refugiado “se inserta en el Año de la Misericordia, punto de referencia para toda la Iglesia en los próximos meses”, explicó al presentar el documento el cardenal Antonio María Veglió, presidente del Pontificio Consejo Pastoral para los Emigrantes e Itinerantes.

“En nuestra época –escribió el papa Francisco–, los flujos migratorios están en continuo aumento en todas las áreas del planeta: refugiados y personas que escapan de su propia patria interpelan a cada uno y a las colectividades, desafiando el modo tradicional de vivir y, a veces, trastornando el horizonte cultural y social con el cual se confrontan”. Y agregó, recordando el trágico tráfico de seres humanos: “Cada vez con mayor frecuencia, las víctimas de la violencia y de la pobreza, abandonando sus tierras de origen, sufren el ultraje de los traficantes de personas humanas en el viaje hacia el sueño de un futuro mejor. Si después sobreviven a los abusos y a las adversidades, deben hacer cuentas con realidades donde se anidan sospechas y temores”, concluyó. De hecho el Papa describió la situación que Europa ha podido verificar cada día con los traficantes que obligan a los inmigrantes a atravesar el Mediterráneo en barcazas semi destruidas que luego se hunden, o atravesar las rutas en camiones herméticamente cerrados y mueren asfixiados. Según la ONU, desde enero de 2015, sólo en el Mediterráneo murieron 2800 personas.

Y en tácita alusión a lo que ha sucedido últimamente en la Unión Europea, donde algunos de sus países han levantado muros como fronteras y han hecho demasiado poco para reconocer y asumir el flujo migratorio, el Papa recordó que los migrantes a menudo se encuentren en los países donde llegan “con falta de normas claras y practicables que regulen la acogida y prevean vías de integración a corto y largo plazo”. Ante esto el pontífice subrayó la importancia del Evangelio de la Misericordia, para que, dijo, los católicos no se acostumbren al “sufrimiento del otro”. De hecho fue en este contexto que Franciscó tituló su mensaje “Emigrantes y refugiados nos interpelan. La respuesta del Evangelio de la misericordia”.

El Papa argentino, que desde que fue elegido en 2013 se ha ocupado repetidamente de inmigrantes y refugiados, consciente de que el problema es mundial se refirió al tema también en su reciente viaje a Estados Unidos, tanto en sus discursos ante las autoridades estadounidenses como en el que realizó ante la asamblea general de Naciones Unidas, en Nueva York. “Los flujos migratorios son una realidad estructural y la primera cuestión que se impone es la superación de la fase de emergencia para dar espacio a programas que consideren las causas de las migraciones, los cambios que se producen y las consecuencias” sobre los pueblos, subrayó Francisco en el mensaje. “Todos los días, sin embargo, las historias dramáticas de millones de hombres y mujeres interpelan a la Comunidad internacional, ante la aparición de inaceptables crisis humanitarias en muchas zonas del mundo –añadió–. La indiferencia y el silencio abren el camino a la complicidad cuando vemos como espectadores a los muertos por sofocamiento, las penurias, las violencias y los naufragios.”

Francisco, que hablando en Estados Unidos recordó que él era hijo también de inmigrantes, se refirió asimismo al tema de la integración, uno de los puntos vitales para que el migrante pueda sentirse cómodo en un país y los que lo acogen también. “Quien emigra, de hecho, es obligado a modificar algunos aspectos que definen la propia persona e, incluso en contra de su voluntad, obliga al cambio también a quien lo acoge. ¿Cómo vivir estos cambios de manera que no se conviertan en obstáculos para el auténtico desarrollo, sino que sean oportunidades para un auténtico crecimiento humano, social y espiritual, respetando y promoviendo los valores que hacen al hombre cada vez más hombre en la justa relación con Dios, con los otros y con la creación? (...) ¿Cómo hacer para que la integración sea una experiencia enriquecedora para ambos, que abra caminos positivos a las comunidades y prevenga el riesgo de la discriminación, del racismo, del nacionalismo extremo o de la xenofobia?”

Según el Papa, la respuesta a estas preguntas es que “el cuidar las buenas relaciones personales y la capacidad de superar prejuicios y miedos son ingredientes esenciales para cultivar la cultura del encuentro, donde se está dispuesto no sólo a dar, sino también a recibir de los otros. La hospitalidad, de hecho, vive del dar y del recibir”.

Pero Francisco fue más lejos todavía, pidiendo a la comunidad internacional “ayudar a los países del cual salen los emigrantes y prófugos” a través de “la solidaridad, la cooperación, la ecuánime distribución de los bienes de la tierra”, para que la gente, en definitiva, no tenga necesidad de abandonar su país, su cultura y su familia. También pidió acabar con la violencia y las persecuciones y , aludiendo tácitamente a algunos hechos que se han verificado en la prensa italiana, dijo que “la opinión pública sea informada de forma correcta, incluso para prevenir miedos injustificados y especulaciones a costa de los inmigrantes”. El Papa asimismo atacó las “nuevas formas de esclavitud gestionadas por organizaciones criminales” que venden y compran a hombres, mujeres y niños como trabajadores de la construcción, la agricultura, la pesca entre otros, que transforman a los niños en soldados o que son víctimas del tráfico de órganos, la mendicidad forzada y la explotación sexual. Francisco concluyó encomendando a todos los migrantes y prófugos a la Virgen María y a San José que también sufrieron, recordó, “la amargura de la emigración a Egipto”.




http://www.pagina12.com.ar/